Viajar con niños es una experiencia única que les permite educarse más allá de un aula de clase. Debido a que ellos siempre deben viajar con sus familiares adultos, es también una oportunidad para que toda la familia disfrute y fortalezca sus lazos emocionales.
Por estos motivos, un viaje con niños debe tomar en cuenta tanto factores para los niños como algunos elementos básicos que garanticen el disfrute y tranquilidad de todos. A continuación, te presentamos una guía que te puede ayudar a planificar tu próximo viaje con niños sin desfallecer en el intento.
Planifica a través de agencias de viajes enfocadas en viajes con niños: contactar este tipo de agencias debe ser el primer paso para comenzar a planificar tu viaje. Allí encontrarás información valiosísima que seguramente no está disponible en otro tipo de agencias. Actualmente tienes la ventaja que también están disponibles en páginas web y tienes gran variedad para escoger. Por ello, es fundamental conocer las distintas agencias de viajes para seleccionar aquella que nos de un presupuesto adaptado a nuestras necesidades, nos asesore y ofrezca otro tipo de información de interés, como una guía de viaje, etc.
Involucra a los niños en la planificación del viaje: un buen viaje comienza desde el momento que comienzas a planearlo. Si los niños ya tienen cierta edad que les permita expresar algunos de sus gustos, pregúntales o presenta algunas propuestas para que ellos opinen y ayuden a tomar algunas decisiones. Esto permitirá que ellos disfruten aún más sus viajes y vacaciones y que encuentres un balance entre lo que los adultos y los niños verdaderamente desean.
Obtén seguros de viaje: este tipo de seguros son siempre recomendados, especialmente si son viajes al extranjero. Y si viajas con niños, estos son indispensables para garantizar tu tranquilidad y el manejo de cualquier accidente o eventualidad en las mejores condiciones posibles. Los padres tienden a angustiarse en gran medida cuando se trata de la salud de sus hijos y esta previsión les ahorraría muchas molestias.
¿Hotel, resort, o Airbnb?: aunque disfrutes al máximo los beneficios de un hotel, tales como servicio a la habitación, botones, clubs, piscinas, y cambio de toallas, debes considerar las ventajas de otro tipo de alojamiento cuando se trata de niños. Las propiedades vacacionales tipo Airbnb ofrecen la ventaja de poder tener habitaciones separadas y espacios más grandes para compartir, además de cocinas propias y la comodidad de una casa. Si no puedes decidir entre los dos estilos, puedes optar algunos resorts que incluyan cocinas y espacios más grandes para instalarse.
Balancea el viaje entre educación y diversión: cuando escojan y decidan los sitios que quieran visitar, balancea aquellos que proporcionen educación tales como museos y lugares históricos, con aquellos que proporcionan mucha diversión. De esta manera los niños se cansarán menos y podrán aprovechar mejor su viaje. Recuerda que las vacaciones son también días para desconectarse de la rutina de aprendizaje del cole.
Los elementos anteriores son indispensables para que tengas un viaje con tus niños. Sin embargo, hay muchos otros puntos que pueden ayudarte a que éste se aun éxito, tales como:
- Decidir el tipo de transporte más cómodo. Es decir, vuelos directos en lugar de vuelos con escala; minivans en lugar de vehículos deportivos, etc.
- Llevar todos elementos de distracción, como juguetes, video juegos, tabletas, juegos de mesa, etc.
- Llevar alimentos especiales si son necesarios, además de snacks y meriendas para los tiempos de espera.
- Toma en cuenta las diferencias de edades si se trata de varios niños.
Recuerda que mientras más precavido seas, más posibilidades tienes de que tú y tus hijos disfrutéis al máximo; de ahí la importancia de elegir bien una agencia y preparar el itinerario de viaje que os guste a todos.